DJEVEL OFRECIÓ UN RITUAL OSCURO EN LA BOCA DEL LOBO

DJEVEL/FOGOS/UMBRAETERNUM Sala Wolf (Barcelona) 03/02/23
PROMOTOR: Black Matter Productions

La zona barcelonesa de Marina, y en especial la calle Almogàvers es de una especial energía para cualquier amante del rock'n'roll, en su sentido más amplio. Allí vi mis primeros conciertos, cuando era menor de edad, de gente como los punkis locos de Toy Dolls, y coreé a pleno pulmón con toda la multitud los himnos tristes de Los Suaves. Hacía como tres millones de años que no pisaba la telúrica de la zona, así que me fui con los ojos abiertos como ovnis. En el metro ya había algunos individuos que, cantaba como una almeja, iban al mismo puesto que yo. En concreto, dos chicas y un chico veinteañeros, con el uniforme oscuro de rigor, chupa incluida. El bareto de la esquina de la calle Almogàvers rezumaba bullicio, gran parte de la peña se amontonaba allí a tomarse unas birras a un precio más módico que dentro de la sala. Y en la fila de la sala Wolf (antes llamada, más castizamente, Sr. Lobo) ya me encontré las primeras caras conocidas de la noche. Había expectación con Djevel, pues nunca antes habían hecho gira por estas dichosas tierras en las que nos ha tocado vivir.

UMBRAETERNUM
​
Y puntualmente abrieron fuego a discreción los madrileños Umbraeternum, con la Wolf a medio aforo, todavía. Con un frontman gigante y barbudo, vestido con saco monástico, empezaron azotando al respetable con ‘Predadores Espirituales’. Continuó su ráfaga sonora astral con ‘Umbratum (Retorno al Abismo)’ y ‘Expansión Cósmica Negativa’. No hacen blackgaze, precisamente, sin embargo es de destacar el fuerte muro de sonido que construyen, cual fortaleza infranqueable, por muy orco que te pongas. También el registro vocal de Insa-Fernus, desde lo más abisal hasta lo casi gregoriano, pasando por la característica voz raspada, más común. Como crítica, son quizás un grupo demasiado estático encima del escenario. Aunque lo de recitar algo de espaldas al público, cual misa tridentina del zumbado arzobispo cismático Marcel Lefebvre, tiene su gracia. Insa-Fernus canta en castellano, no en latín, aunque no se entiende mucho lo que nos dicen sus de otro lado. Interesantes letras sobre el caos, la muerte o la oscuridad. Sea como fuere, siguieron dando tralla con ‘El Viaje de Umbratum’, un interludio, ‘La Rebelión de los Usumgal’, ‘Transmutación en el Supremo Arte de las Fuerzas Negras’, para acabar con ‘Universo (La Daga del Infinito)’.
 
 

FOGOS
 
Y tras una breve pausa, ya teníamos a los Fogos encima de las tablas. La sala se llenaba, mientras nos disparaban el volcánico ‘Akheron’ en todo el jeto. Le siguieron ‘Keres’, ‘Mortis’, y luego ‘Caronte’. La música más dinámica de los barceloneses se traducía también en una gran interacción con el público, no solo del cantante Saten Haz Im Nu, que se movía de un lado para otro cual pantera ansiosa, sino también del guitarra Kerberos y el bajista The Butcher. Continuaron con ‘Nyx’, ‘Dysnomia’ y ‘Eidolon’, dejando un muy buen sabor de boca al respetable. 

​
Una banda que cada vez está a mejor nivel en la balanza de ese black metal crudo de raíces noruegas, y es que, Fogos no tardarán en dar el salto a escena blasfema europeo. Lo decimos con los ojos cerrados, pero ya. Los de Barcelona dejaron el pabellón bien alto del black metal que se hace en la Ciudad Condal, e hicieron los deberes a la perfección dejando el ambiente bastante caldeado para los noruegos, quienes dejaron en el respetable un muy buen sabor de boca, ya al acecho para ver a Djevel. ¡¡¡FOGOS TRUE BLACK METAL!!!

DJEVEL
 
En la parada, el “merchandising” se evaporaba, en especial las camisetas de Djevel, y la sala lucía abarrotada, que apenas cabía un alfiler; cuando de repente se hizo la oscuridad total, solo alumbrada por dos candelabros: ya teníamos a dos palmos de nuestras narices a Trann Ciekals, Kvitrim, y a Faust a los parches, los músicos de directo que ya llevan un tiempo saliendo de gira son Nosophoros (guitarra) y  Mannevond (bajo) que con su “corpsepaint” me recordaba al de Beherit, la verdad sea dicha no era el único, quienes daban realmente pavor sus miradas, sobre todo la de su cantante, que a las primeras filas miraba con una mirada desafiante por encima del hombro. Ese es el verdadero black metal, nada de posturitas. ¡Black noruego, joder!

Había muchas ganas de ver el arte percusivo del ex de Emperor y Thorns. Empezaron su emocionante rito con la larga y mágica canción ‘Englene som falt ned i min seng, skal jeg sette fri med brukne vinger og torneglorier’, mientras mis pelos como escarpias vibraban al son de los poderosos “blast-beats”, fuere tanto en los momentos más melódicos como en los más guerreros. Le siguió la más encabronada, ‘Det svartner paa likbleik hud’. Trann en los primeros temas no paró de quejarse que no se le oía, y el hombre tenía razón ya que su guitarra no se apreciaba nítidamente, ya después el percance se solventó y pudimos gozar de esas notas tétricas y fantasmagóricas que sabe sacar de sus 6 cuerdas.

​Impresionaba la estatura y la actitud de los noruegos, mientras el público se entregaba a tan nostálgico conjuro por momentos. El hechizo nórdico continuaba con ‘Afgrundsferd’, la primera canción de su último disco que tocaban. Es muy de agradecer que, aunque oficialmente este concierto era para la presentación de su último álbum, los de Oslo, conscientes que era su primera gira en España nos ofrecieron una cierta retrospectiva de canciones de su discografía. La algo más sosegada, ‘Paa vintersti skal hun synge en gravsang som aldrig ender’ de más de diez minutos precedió a ‘I daundens dimme natt’ , mientras la peña llegaba a su punto óptimo de ebullición. A ‘Maanen skal være mine øine, den skinnende stierne mine ben, og her skal jeg vandre til evig tid’ le sucedió ‘Kronet av en væpnet haand’, y la cosa estaba a punto de caramelo, ya, cuando los mastodontes noruegos se despidieron. Supongo que nunca tenemos lo suficiente, pero de hecho nos quedamos con ganas de un poco más de ritual.  

METAL FRIENDS
Texto: Makoki13
Fotos: Àlvar LG/Francis Prados